Resolver problemas es parte del negocio, pero resolverlos es necesario continuar el crecimiento del negocio.

Si quieres ser un buen empresario debes de tener una mentalidad de resolución de problemas y aprender a disfrutar tanto del problema como de la solución que le encuentres, esto siempre te ayudara a crecer. Así que aprende de tus problemas tanto en tu emprendimiento como en tu vida.

Los problemas al inicio son normales así que siempre debes mantener una actitud positiva.

Si te enojas o te frustras con tu equipo cada vez que hay un problemas va a arriesgar el éxito de tu emprendimiento. Resolver problemas más  que cualquier habilidad o proceso en particular depende de tu actitud hacia la situación.

Recuerda que aprender siempre requiere escuchar.

El mayor problema de los emprendedores a veces es aceptar que tenemos un problema existente.  Para poder solucionar un problema tenemos que aprender a escuchar sin estar a la defensiva. No puedes resolver un problema si no lo ves.

Comunícate abiertamente con el equipo.

No debes esconder los problemas de la empresa del equipo y como buen líder debes enfrentarlo y asumir la responsabilidad de solucionarlo. Sin embargo no debes prometer cualquier solución hasta que hayas tenido tiempo de investigar a fondo.

No dudes en llamar a un experto.

Un experto puede ayudarte a ahorrar muchas horas de frustración y esfuerzos fallidos. Así que cuando lo necesites pide ayuda y sigue las sugerencias de los expertos.

Has un análisis antes de sacar conclusiones tempranas.

Asegúrese de tener toda la información antes de empezar a buscar soluciones. No dejes que tus emociones te manejen y te lleven a tomar una mala decisión ya que siempre hay al menos dos respuestas para tu pregunta.

Indaga en cada problema.

Las crisis nace cuando no se está prestando atención al problema. Por eso es necesario, manejar de forma organizada  la información  que va a ayudar a que el problema se resuelva.

Establece fechas límite y paga por buen trabajo.

No te enfoques en buscar nuevos clientes hasta resolver los problemas con los que ya tienes. Asegúrate de llevar un recuento de problemas, de el tiempo de resolución que te va a llevar y el impacto en los ingresos que te va a generar.

Evita tener problemas similares.

Cada vez que se presente un problema tómalo como una oportunidad para aprender y crecer y aplicarlo en futuras circunstancias de esta forma evitaras problemas o verte envuelto en situaciones similares.