
El impacto de las políticas de Trump en el comercio y la cooperación internacional en América Latina
Donald Trump tomó posesión como 47º presidente de los Estados Unidos el pasado 20 de enero de 2025 y, esa misma tarde, firmó 26 decretos, más de los que firmó el primer día de su primer mandato (uno), y de los que firmó el primer día su predecesor Joe Biden (nueve). Desde entonces, no ha parado. Cada medida está teniendo un impacto interno aún difícil de medir, pero también en la región y a nivel global.
Los constantes anuncios de la segunda administración Trump están aumentando la incertidumbre y reduciendo la confianza, dos factores indispensables para prever escenarios. Sin embargo, analistas y expertos en Public Affairs trabajan para hacer estimaciones, indispensables para quienes estén pensando en iniciar, mantener o finalizar alguna relación comercial con Estados Unidos en los próximos meses.
Es el caso de la firma global de Marketing y Corporate Affairs LLYC, que ha presentado un análisis titulado Trump II: Impacto y Reconfiguración de las Relaciones con América Latina, en el que nueve expertos de México, República Dominicana, Panamá, Colombia, Perú, Ecuador, Brasil, Chile y Argentina, examinan las consecuencias de tales políticas y su impacto en la región desde la perspectiva del comercio y la cooperación internacional.
Comercio: En riesgo
Señala el informe que el proteccionismo anunciado en la campaña se ha visto reflejado en el aumento de aranceles a productos importados para fortalecer la industria nacional. Las nuevas medidas y la reconfiguración de acuerdos comerciales ya estarían generando una presión significativa sobre las economías latinoamericanas, con efectos directos en el comercio, la migración y la estabilidad social.
Para los países que tienen a EE. UU. como su primer o segundo destino comercial, esto supone un riesgo significativo. Además, el discurso de las primeras semanas estaría siendo muy confrontacional, algo que podría generar mayor distanciamiento con gobiernos de izquierda y cercanía con aquellos más alineados a la visión de Trump.
Para los expertos de LLYC, las relaciones comerciales en América Latina están en riesgo debido al aumento de aranceles en sectores estratégicos como el automotor en México y el agroindustrial en Brasil. Además, la posible revisión de tratados comerciales como el T-MEC y el DR-CAFTA impactaría en exportaciones clave en Perú, Panamá y República Dominicana.
Advierten en el informe que la dependencia comercial de economías como las de Colombia y Chile las hace vulnerables y limita su capacidad de negociación. Pero pone el ejemplo de México y Brasil, que para minimizar los riesgos, sus gobiernos han optado por la diplomacia y el fortalecimiento de sus estrategias comerciales, no así Colombia, que enfrenta tensiones debido a su alineación política y comercial con EE.UU.
Cooperación internacional: En vilo
Para los expertos que intervienen en este informe, la cooperación internacional se encuentra en vilo. Al desaparecer los fondos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la afectación sería de grandes proporciones en programas de seguridad, educación y salud en la región.
Recordemos que la web de esta agencia federal independiente cerró el pasado 10 de febrero, al igual que sus oficias, congelando la gestión del 42% de la ayuda humanitaria internacional. La pretensión es reducir la plantilla a 300 trabajadores, de los 10.000 que ha tenido hasta ahora, y se desconoce qué programas quedarían en pie, y su cuantía.
Otros efectos en la región en materia de cooperación internacional se verán tras la retirada de los fondos a diferentes agencias de Naciones Unidas como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la suspensión de la participación de Estados Unidos en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Asimismo, el retiro de EE.UU. de acuerdos ambientales como el Acuerdo de París debilitaría los esfuerzos de conservación en la Amazonía. También advierten los expertos que la agenda medioambiental y los acuerdos multilaterales podrían convertirse en puntos de fricción con el gobierno de Trump.
Bajo este panorama, aseguran que China podría incrementar su influencia en la región como socio estratégico de las economías latinoamericanas.
La recomendación: Diplomacia y diversificación
Los expertos valoran como fundamental la diplomacia para evitar deterioros estructurales en las relaciones bilaterales que puedan representar sanciones o recortes en la cooperación internacional, así como basar la toma de decisiones en intereses de Estado y no en ideologías políticas.
El informe de LLYC concluye que urge que Latinoamérica mire hacia un mercado global, con la intención de diversificar sus socios comerciales. “La diversificación de las exportaciones no solo implica alcanzar nuevos mercados, sino sumar valor agregado a los productos exportados”, explican. Esto se lograría a través del fortalecimiento de políticas internas que mitiguen la dependencia económica con EE.UU. y una apuesta por la tecnología, la infraestructura y la competitividad.